Ahora que ya sabéis el gran notición de que vamos a ser papis el próximo otoño, no hace falta que os diga que este veranito voy a tirar de vestidos más que nunca.
Y es que, si ya antes me inclinaba por ellos con la llegada del veranito y del calor, ¡imaginaros ahora que mi tripa crece por momentos! Sin duda, es mi prenda favorita para lucir guapas, cómodas y fresquitas en la temporada estival.
Y no, nunca tendré suficientes vestidos blancos en el armario. Podría tener todo un repertorio de ellos de diferentes cortes, estilos y tejidos: de volantes, de crochet, de encaje, de algodón… El último en entrar en mi armario ha sido este white dress de inspiración boho, una de las tendencias más arrasadoras de este verano.
Lo que más me gustó de él a parte de su color y versatilidad, ya que se adapta a cualquier localización (puedes lucirlo tanto en la piscina, como en tus jornadas de playa como dar un paseo por la ciudad), fueron sus mangas. Y es que puedes lucirlo de dos formas, luciendo hombros con los tirantes o bien subirte las mangas a modo camiseta como os muestro en las fotografías. ¿A vosotras cómo os gusta más? Yo prefiero dejarme la primera opción para cuando tenga los hombros más bronceados… Y sí, ¡seguramente se venga conmigo a Nueva York! 😉
Vestido blanco – Polinesia (SS 16)
Cuñas rosas – H&M (SS 16)
Bolso con motivos florales – Vintage
Sombrero canotier de ala ancha – Zara home (SS16)
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